Los vallados de aluminio son ideales para el cierre exterior y perimetral de viviendas por su elegancia y por la durabilidad del material con los que se fabrican. Sobre todo indicadas para lugares con mucha humedad o al lado del mar.
El aluminio es un material ligero y resistente, su peso es muy inferior al hierro, evitando descolgamientos en paredes. Es un material que no se parte, no se arruga ni se hincha y admite cualquier tipo de tonalidad.
Las cancelas de aluminio, además de las ventajas derivadas de su durabilidad, a diferencia de otros materiales, no les afecta la climatología. Son muy resistente a la corrosión, por lo que no precisan mantenimiento de ningún tipo.
Combinan a la perfección con cualquier modelo de cancela corredera, pivotante o peatonal.